Segur una dieta para perder peso es estresante. Cada vez más personas sienten que la comida y todo lo que tiene que ver con ella (desde elegir y comprar los alimentos, a organizar los menús de la semana o meterse en la cocina para preparar los platos) se ha convertido en una especie de tormento. Lejos de disfrutar comiendo, sienten agobio cuando piensan que llevarse a la boca. Si se reprimen excesivamente, sufren. Y si comen más de la cuenta, también. Así, entran en un círculo vicioso que les lleva inevitablemente a pensar que comer no es agradable.
La comida es el mejor antidepresivo que existe. Cuando detectamos una situación estresante, intentamos evitarla comiendo. Lo hacemos varias veces al día. Por eso, la solución no es amargarse cada vez que nos sentamos a la mesa, sino establecer una nueva relación con el plato.
No en vano hay encuestas que demuestran que la comida proporciona mucho más placer que, incluso, las relaciones con la pareja.
Pero hay otros estudios que han demostrado que las mujeres que disfrutan menos con la comida (por el miedo a engordar) son mas propensas a la obesidad.
Entonces ¿ Como cuidar el peso ?
- La primera regla es no relacionar el comer con esas posibles insatisfacciones diarias.
- La segunda norma es que tu dieta sea variada.
- Confía en ti misma y se positiva. No más miedos ni sentimientos de culpa. Plante la dieta como una carrera en la que importante es cubrir una meta cada día o cada semana.
- Las rutinas te dan seguridad. Todo cambio genera incertidumbre. Por eso necesitas rutinas que te den seguridad:
Escoge una comida o una merienda que te guste especialmente o te recuerda algo agradable y tómalo siempre el mismo día de la semana. Disfruta de el sin ningún tipo de remordimiento.
Elabora una lista con los platos que mas te gustaban de pequeña. Prepáralos a tu manera y disfruta de ellos como años atrás.
- No engordas por comer, sino por hacerlo en exceso o mal
- Cuando algo te apetezca mucho, espera 10 – 15 minutos procurando hacer algo que te da placer. Si después de ese tiempo sigue apeteciéndote mucho, tómalo.
- Reflexiona sobre cuanta cantidad te comerías. Utiliza platos más pequeños.
- Tomar una porción moderada de un capricho no es un fracaso.
- Si acabas tomando mucho más de lo que te habías propuesto, procura moverte más ese día.
- La moderación no engorda. Olvídate de la palabra "prohibido"
- De vez en cuando puedes permitirte "caprichos", siempre que vigiles la cantidad que vas a comer.
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