que pueden llevar a una persona a traicionar a su pareja (infidelidad)
Hacer balance es esencial. No se trata simplemente de juzgar a tu compañer@ ya que el balance puede ser útil también para darte cuenta de que tu eres l@ primer@ que estas fallando y deberías cambiar.
- No valoras a tu pareja. Con el paso del tiempo puedes haber llegado a tener menos en cuenta a quien tienes a tu lado. Ya no valoras las cosas buenas que te aporta y las das por sentadas.
A veces con la infidelidad se puede acabar una relación, a veces se trata de una oportunidad para mejorar y reforzar la relación.
- Te has relajado. La tan preciada estabilidad a veces hace que uno baje la guardia al pensar al pensar que la vida en pareja ya esta consolidada. Es un error muy común. Pero no hay que olvidar nunca que una relación necesita ser alimentada y cuidada cada día.
- Se realista. La rutina y la monotonía afectan la relación. Las relaciones se inician siempre con mucha ilusión pero con el tiempo, la monotonía puede haberos llevado al aburrimiento. Incluso puedes estar sintiendo que ya no tienes nada de que hablar con ell@.
- Desgaste. La convivencia y los roces que supone la vida pueden hacer que entréis en una dinámica de conflictos, peleas y recriminaciones. En caso de no saber como avanzar, resulta muy útil pedir ayuda profesional.
- Intromisiones. A veces, y sin que nos demos cuenta, las familias de los dos pueden llegar a entrometerse demasiado en nuestra relación y esto acaba provocando tensiones.
- Trabajo. La excesiva dedicación a la vida profesional por parte de alguno de los dos resta tiempo a la pareja. Del mismo modo, un reparto desigual en las tareas domesticas también puede perjudicar.
- Falta de pasión. Tras muchos años de vida en común las relaciones sexuales resulten repetitivas e insatisfactorias.
- Manías. Es normal que algunos hábitos de tu pareja que antes te parecían anecdóticas ahora empiezan a sacarte de quicio. Seguramente os ocurre a los dos. Si se trata de pequeñas manías sin importancia lo mejor seria que intentaras aceptarlas. En el amor todo es significativo. Con la familiaridad, puedes empezar a interpretar como molestas cosas que antes te atraían de la otra persona. Acepta que hay algunas cosas que no están funcionando bien.
- Sacrificios. Muchas veces, para facilitar la estabilidad familiar se sacrifican proyectos personales. Sin darnos cuenta, terminamos por culpabilizar a nuestra pareja por no haber podido lograr nuestros sueños. Recobrar estas ilusiones te servirá para sentirte mejor contigo misma@
Si es tu caso intenta cambiar. Es un reto difícil. El verdadero problema aparece cuando la pareja no reacciona frente a un balance negativo.
Utiliza la frustración como motivación. Muestra lo mejor de ti. No olvides que la gente no nos quiere por nuestra mera necesidad de ser queridos, sino por los valores personales que nos hacen atractivos.
Desarrolla tu Autoestima y crece como persona. Difícilmente podemos amar a los demás si no nos queremos lo suficiente a nosotros mismos.
No fuerces las cosas. Sabiendo sufrir se sufre menos. No conviene insistir para mantener una relación cuando el otro no esta dispuesto a ello, por que entonces se consigue lo contrario. Cuando una pareja tiene un conflicto, criticar al otro no ayuda a ninguno. Cada uno debe preguntarse que parte de responsabilidad tiene en lo que esta ocurriendo.
Lo mejor en este caso es aceptar la decisión de su pareja y autoanalizarse para mejorar. Si lo hace, quizá se pueda recuperar la relación.
Superar el duelo tras una ruptura requiere tiempo suficiente y una actitud adecuada.
Aprende de los errores. Aprendiendo de los errores y mejorándonos como personas podremos acertar al elegir a la persona amada.
Los ingredientes de una pareja estable son cuatro:
- Buen acoplamiento sexual
- Caracteres compatibles
- Valores similares
- Intereses en común